Personajes del rock a la manera de Ovni, El Salvador

Lo suyo es rock. Matiza sí, pero es rock y por ratos progresivo. Es lo que tiene entre ceja y ceja el cantante y guitarrista Rafael Alfaro, miembro fundador del grupo salvadoreño Ovni, que publica su nuevo y décimo álbum Personajes…Out of the window. Después de 38 años de actividad, la banda sigue empeñada en expresarse con un estilo que le caracteriza, ciertamente a veces con elementos pop.

De hecho, el primer sencillo que presentó fue El atraedor, una canción que se refiere a aquellas personas que se jactan de atraer con habilidad la prosperidad pero confunden y engañan a los demás, es interpretada en tiempo rápido y marcado con elementos electrónicos. Un buen inicio del álbum, con esa mezcla de guitarra acústica y eléctrica, sin poder evitar por supuesto una barrida de requinto entregada, energética y sicodélica. La canción, con acento rock pop ochentero, tiene gancho y una convincente interpretación vocal.

Antes de continuar hay decir que Ovni está integrado en esta producción por Fernando Arce en la batería; Raúl Arce en el bajo; Herson Flores en los teclados; y obviamente Alfaro, que le dan cuerpo a las once canciones del disco, en inglés y en español.

Hay composiciones que llaman la atención, como, El reflexionador, The influencer, The rescuer y The Colossal, que tienen ese punto de rock retro, progresivo y original, e igual un nivel de profundidad que no está presente en otros temas.

En El reflexionador, con una introducción rítmica de danza indígena norteamericana para luego escuchar una especie de balada para enseguida dar pie a potentes guitarrazos. Aquí hay matices, juegos, tempos, incluso escapadas tipo rock progresivo. Hay incluso flauta, piano, sonido de órgano, de sintetizador, que nos permite recordar aquellas viejas tonadas de Genesis o King Crimson de los setenta. La canción reflexiona sobre aquello que pudo haber sido de nuestro planeta, aquel paraíso, si se hubieran seguido los designios de la Naturaleza. La canción toma más de ocho minutos.

The influencer, atrae porque me recuerda a Uriah Heep, ese grupo británico de rock progresivo con cierto éxito comercial a inicio de los años setenta que proveía a su trabajo estribillos que enganchan. La voz con fuerza y convicción de Alfaro, no requiere más. Ahora bien, la pieza sí tiene ese toque comercial tanto en lo melódico, en su estructura como en la incorporación de coros. El sintetizador pone el remate final a esta buena canción. 

The rescuer es otra de las canciones con gancho, interpretada con mesura en inglés. Acá Alfaro de nuevo se asiste de sintetizadores que de hecho parecen darle cuerpo al tema. La parte que llama la atención, no sin cierta tensión, es donde ocurre una especie de batalla entre sintetizador y guitarra. 

Y por último Colossal, donde nos vuelve a ofrecer ese rock progresivo en inglés muy de los años 80. Alfaro es un amante de la Naturaleza, y eso está patente en su discografía. Esta pieza aborda ese tema, en el que combina instrumentación acústica con eléctrica, por supuesto con sintetizador que al final son el núcleo central para la operabilidad instrumental. Canta con sosiego pero también con intensidad. De hecho, vuelven a estar presente esos cambios de tempo entre serenos y tensos, con sorprendentes impulsos expansivos de sintetizador y guitarra. El ensamble parece movilizarse con una musculatura renovadora dentro de sus progresiones armónicas. Da la impresión que durante los 13 minutos que dura la canción, en realidad son dos o tres. 

Si se habla que el grupo ha evolucionado, seguramente se diría que sí. Aunque Alfaro es prudente y mejor admite que, “algunas cosas no han mejorado. Las ideas son las mismas. Los temas de las canciones son las mismas, lo que cambia es la forma, el carácter y el estilo de decir las cosas. También cambia el sonido, el arreglo, el ritmo de cómo suena la música. Ovni ha evolucionado para bien o para mal, en el sonido”.

Ante eso, por sus buenas maneras instrumentales y riesgos, no queda duda entonces que estamos ante un grupo que hace acopio de lo vivido y experimentado en más de tres décadas, que no duda en preservar y cuidar un estilo que le ha dado tanto nombre. Y una voz, que a decir verdad, aún se encuentra en buen estado de salud. Ovni podría decirse es ya de los grupos leyenda del área centroamericana, y esta ambiciosa producción es prueba de ello. Sí, es un auténtico regalo a oídos que aún se dejan sorprender.