Daniela Spalla en el centro del escenario

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Muchos artistas por estos tiempos han usado la década de los 80 como inspiración. La inclusión de sintetizadores y el pop melifluo que, por momentos, es insoportable. 

Hay ecos de todo aquello en muchos artistas en la actualidad como Silver Rose, Ev, Hello Seahorse, Ataque Celeste, y así podemos sacar más trapos al sol de lo necesario. Es una tendencia que veremos a dónde nos lleva. Por el momento vamos bien. 

Es de agradecer esta reinvención con fórmulas novedosas que potencian aquella época y qué mejor un género como el indie actual para reafirmar este brote creativo.

Spalla nacida en Córdoba, Argentina y radicada en la ciudad de México desde el 2013, cambió de escenario para abrir el telón a su carrera musical, y lo logró. Ya se le pone al nivel de la mexicana Natalia Lafourcade y la chilena Javiera Mena.

Puro teatro es su tercer disco después de Ahora vienen por nosotros (2014) y Camas separadas (2018), grabados en México mientras que Magma (2010) yDesvelo (2005) fueron grabado en Argentina.

Spalla se escucha creativa y libre con “Puro Teatro” hasta se le han pegado algunas palabras propias del imaginario “chilango” sin que eso sea una causa para incomodarla; al contrario se escucha dispuesta a echar raíces. 

La artista seduce con esa voz dulce y lista para destruirte con una línea tierna como en Copy Paste, la primera canción que abre la obra. Sabia que no andabas bien / Y quise ir a buscarte al fondo / Traté de aparecerme en todo / Para que sintieras que no estabas solo”.

Te veo a la salida parece un homenaje a Laura Branigan y su Spanish Eddie y la letra es aquella novela romántica que quiere mostrarse al mundo. Tenerte aquí tan cerca y no poder hablar / Quemarnos con miradas sin poder gritar / Esclavos del secreto de este amor / Que arde entre los dos /Y me hace mal”.

Provincia tiene esa invitación a ternura y libertad. Carteles  y Ya nos vamos sigue esa ternura que derrite hasta el corazón más duro y nos invita a viajar por toda la ciudad o el mundo y que sea el amor que nos dirija.

Me voy es un corte bailable así como se baila en películas como The Breakfast Club o Sixteen Candles.

Si te alejas, es un desasosiego propio a causa de un amor indeciso. Salí a buscarte en fotos y discos anoche / Llegó un viento helado y atrás tu voz / Busqué recuerdos, encontré rencores / Al fin no está impaciente mi corazón”. Y es que a veces uno no está listo.

No me hables de amor es una canción dolorosa que prefiere el adiós a la mentira que da una esperanza con los bolsillos vacíos. La letra y voz de Spalla no buscan desatar la ira de Dios, ser cruel o crear un tsunami emocional; solo con un poco de dulzura la patada duele más.

Bailando lentos es una colaboración con Goyo Degano vocalista de Bándalos Chinos. Pareciera que retrataron el día del encuentro de la pareja de la película Before Sunrise que recuerda su gran encuentro y su noche de amor.

Puro Teatro es un viaje por aquella década ochentera y esas películas ingenuas donde la dulzura de Spalla se acopla como narradora principal. Este disco suena más emocionante y más maduro que sus anteriores y aquí nos roba interminables suspiros entre la nostalgia del “pudor ser” y las derrotas más agridulces.

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